Receta de Gateau St. Honoré Francés: Elegancia y Sabor

¡Hola, amigos! Hoy vamos a hablar de algo que seguro les va a hacer agua la boca: el Gateau St. Honoré. Este postre francés es perfecto para esas ocasiones especiales o simplemente para sorprender a los que amamos en casa. Si te encanta la pastelería y querés lucirte en la cocina, quedate porque te voy a contar cómo hacerlo paso a paso. Después de leer esto, vas a sentirte todo un chef, ¡y tus amigos no van a parar de pedirte que lo repitas!

Esta torta es muy elegante, ideal para un cumpleaños, un aniversario o incluso una merienda con amigas. Su combinación de masa choux, crema pastelera y caramelo te hará sentir en un café parisino. Así que, sacá esos insumos de la despensa y preparate para un delicioso viaje culinario.

Ingredientes para la receta de Gateau St. Honoré

• Para la masa choux:
  • 250 ml de agua
  • 100 g de mantequilla
  • 150 g de harina
  • 4 huevos
  • Pizca de sal
• Para la crema pastelera:
  • 500 ml de leche
  • 120 g de azúcar
  • 4 yemas de huevo
  • 40 g de maicena
  • Una ramita de vainilla o esencia de vainilla
• Para el caramelo:
  • 200 g de azúcar
  • Agua (cantidad necesaria)
• Decoración:
  • Crema batida al gusto

Hay que aclarar un par de cosas sobre los ingredientes. Para la masa choux, asegurate de tener la mantequilla a temperatura ambiente pero no derretida. Y con la crema pastelera, te recomiendo que uses una buena esencia de vainilla porque eso le da un sabor especial. ¡No dudes en hacer más porque siempre queda bien para acompañar otras delicias!

Preparación de la masa choux

Ahora, ¡vamos a ponernos manos a la obra! Primero, en una olla grande, pone el agua, la mantequilla y un poquito de sal a fuego medio. Cuando la mantequilla se derrita y la mezcla comience a hervir, añadí la harina de golpe y empezó a revolver con una cuchara de madera. Vas a ver que se formará una masa que se despega de los bordes de la olla.

Retirá la olla del fuego y dejá enfriar un poco. Cuando esté tibia, agregá los huevos uno a uno, mezclando bien después de cada adición. La masa debe quedar suave y brillante. Con una manga pastelera, formá pequeños montoncitos en una bandeja para horno forrada con papel manteca. Cociná a 200 grados durante unos 20-25 minutos, hasta que estén doraditos. ¡No abras el horno antes porque se te pueden bajar!

Creando la crema pastelera

Mientras los profiteroles se hornean, aprovechemos a preparar la crema pastelera. En una cacerola, poné la leche junto con la vainilla y llevála a calentar. En un bol aparte, mezclá las yemas y el azúcar hasta que todo esté bien integrado. Agregá la maicena y seguí mezclando.

Cuando la leche esté caliente (sin llegar a hervir), empezá a volcarla poco a poco sobre la mezcla de yemas, sin dejar de revolver para que no se te formen grumos. Lleva todo de nuevo a la cacerola y cociná a fuego bajo, moviendo sin parar hasta que espese. Una vez que lo logres, dejalo enfriar y cubrilo con film plástico para que no se forme costra.

El arte del caramelo y la decoración

Ahora, vamos con el caramelo. En una sartén, poné el azúcar con un chorrito de agua para que se forme una pasta. Cocinás a fuego medio hasta que el azúcar se disuelva y adquiera un color dorado. Tené muchísimo cuidado en este paso, porque el caramelo quema. Cuando esté listo, desconectá el fuego y deja enfriar un momento.

Para armar tu torta, tomá los profiteroles, sumergilos en el caramelo y pegálos formando un círculo alrededor de la base de la crema pastelera. ¡Es como construir una torre de sabores! Podés completar con crema batida arriba y tal vez un poco más de caramelo por encima.

Disfrutá tu creación

Y ahí lo tenés, un Gateau St. Honoré que va a dejar a todos impresionados. Pasá un rato en la cocina preparándolo, escuchando alguna canción que te guste. Por ejemplo, poné “La Bicicleta” de Shakira y Carlos Vives, que te va a poner de buen humor mientras mezclás y horneás.

Cuando lo saques a la mesa, no olvides tomarle una foto, ¡porque te va a quedar espectacular! Y cuando lo pruebes, vas a sentir que cada mordisco es un pedacito de Francia en tu mesa. ¿A quién no le gustaría disfrutar de un postre así?

Así que no dudes, animate a hacerlo y contá con nosotros para cualquier duda. ¡Buen provecho y a disfrutar!